La disfunción temporomandibular.
Sus síntomas y tratamiento desde el punto de vista de la fisioterapia.
La disfunción temporomandibular (DTM) es un trastorno que afecta a la articulación temporomandibular (ATM) y a los músculos que controlan el movimiento de la mandíbula. La ATM es la articulación que permite que la mandíbula se mueva hacia arriba y hacia abajo y hacia los lados, lo que nos permite hablar, tragar y masticar.
Los síntomas de la DTM pueden incluir dolor o sensación de presión en la mandíbula, dificultad para masticar o tragar, dolor de cabeza o en el cuello, dolor en el oído o en la mandíbula al masticar, y chasquidos o estallidos en la mandíbula al abrirla o cerrarla, el famoso click mandibular.
El tratamiento de la DTM puede incluir el uso de analgésicos o antiinflamatorios para controlar el dolor, y puede ser necesario utilizar una placa de descarga o una férula.
Los pacientes que vienen a AfisionateMadrid encuentran en la fisioterapia y la osteopatía la mejor manera para paliar los dolores. La terapia manual es muy útil para tratar la DTM, ya que los ejercicios específicos que diseñamos para cada paciente relaja/tonifica los músculos de la mandíbula y mejorar la movilidad de la ATM, mejorando en definitiva la función mandibular y la calidad de vida del paciente.
Los tratamientos en la clínica suelen ser de una vez a la semana, dependiendo de cada paciente. Si necesitas aliviar tensiones sin llegar a tener que visitarnos, podemos hacer una sesión online, en la que te enseñamos a realizar unos ejercicios que te ayudan para tu día a día en casa o en la oficina:
- Abre y cierra la boca lentamente varias veces al día para ayudar a mejorar la movilidad de la mandíbula.
- Masajea los músculos de la mandíbula y el cuello con la punta de los dedos para ayudar a aliviar la tensión y el dolor.
- Realiza ejercicios de respiración profunda y relajación para ayudar a reducir el estrés y la tensión muscular.
- Realiza ejercicios de estiramiento de la mandíbula para aumentar la movilidad y reducir la tensión muscular.
Es importante recordar que el tratamiento de la DTM debe ser supervisado por un profesional de la salud calificado, como un fisioterapeuta. Sin olvidar que la visita al dentista, ya que cada caso es único y puede requerir un enfoque específico.
¿Visitar al fisioterapeuta-osteopata por dolores de cabeza?
Si tienes dolores de cabeza y piensas que pueden estar relacionados con problemas de la articulación temporomandibular (ATM) o de los músculos de la mandíbula, podemos asegurar que una visita al fisioterapeuta te ayudará mucho en tu dolor o malestar. Un fisioterapeuta osteópatas somos profesionales de la salud que nos especializamos en el tratamiento de problemas musculoesqueléticos y de movilidad, entre otras patologías.
Durante una visita al fisioterapeuta, te haremos una evaluación detallada de tu dolor de cabeza y de otros síntomas que puedas estar experimentando. Esto puede incluir preguntas sobre tus hábitos de sueño, tu postura y tu actividad física, así como sobre tu historial médico y dental. También haremos pruebas de movilidad de la mandíbula y de la ATM, y utilizaremos técnicas de masaje, movilización y estiramiento para tratar los músculos de la mandíbula y la ATM así como tecnicas craneales y cervicales especificas de la osteopatía mas avanzada.
Recomendaremos ejercicios específicos para normalizar los músculos de la craneofaciales y mejorar la movilidad de la ATM y cervicales y proporcionarte consejos sobre cómo prevenir futuros dolores de cabeza.
En algún caso, podemos llegar a derivar a otro profesional de la salud si observamos sospechas de alguna causa extraordinaria para una evaluación adicional.
Algunos ejercicios que puedes realizar en casa para relajar la mandíbula incluyen:
- Ejercicio de «pulso»: coloca un dedo debajo de la mandíbula y otro encima de ella. Luego, mueve la mandíbula hacia adelante y hacia atrás como si estuvieras h un «paciendo un pulso». Activando suavemente la musculatura. Repite este ejercicio varias veces al día.
- Ejercicio de «chasquido»: coloca la lengua en el paladar y luego chasquea suavemente la mandíbula hacia adelante y hacia atrás varias veces. Este ejercicio ayuda a relajar los músculos de la mandíbula y a mejorar la movilidad.
- Ejercicio de «respiración»: relaja la lengua dentro de la boca y respira profundamente varias veces. Luego, relaja la mandíbula y permite que la lengua se deslice hacia atrás. Repite este ejercicio varias veces al día para ayudar a relajar los músculos de la mandíbula. Puedes echar el aire por la boca suave y lentamente, alargando esta fase respiratoria.
- Ejercicio de «masaje»: masajea suavemente los músculos de la mandíbula y el cuello con la punta de los dedos para ayudar a aliviar la tensión y el dolor.
Es importante recordar que estos ejercicios deben realizarse suavemente y con cuidado para evitar dañar la mandíbula o los músculos. Si sientes dolor durante el ejercicio, detente inmediatamente y lo trataremos en la consulta. Estos ejercicios son de gran ayuda dentro de un calendario de sesiones, ya que ayudan a acelerar la evolución.